6. Tras la muerte de Faustina

Al año siguiente estalló la Segunda Guerra Mundial, cuyo detonante fue la invasión de Polonia por el Tercer Reich alemán. Cuando los nazis invadieron también el territorio de la Unión Soviética, en 1941, la guerra adquirió una dimensión sin precedentes, con el sitio de Leningrado (actual San Petersburgo) y la batalla de Stalingrado (actual Volgogrado). Poco a poco las tropas alemanas tuvieron que ir retrocediendo y, en 1945, el Ejército Rojo entró en Berlín. 

Millones de personas perdieron la vida en la guerra más devastadora que ha conocido la humanidad, durante la cual, además, los nazis intentaron exterminar a la población judía. El Holocausto se llevó a cabo de forma sistemática en campos como el de Auschwitz, construido cerca de Cracovia. Por su parte, el fracaso del levantamiento de Varsovia contra los alemanes, en 1944, dejó esta ciudad completamente arrasada.

En mitad de todos esos horrores, el artista polaco Adolf Hyła pintó un cuadro de Jesús Misericordioso y lo donó a la Congregación de las Hermanas de la Madre de Dios de la Misericordia. El lienzo fue colocado en la capilla del convento de Łagiewniki (localidad que había sido incorporada ya a Cracovia) y con el paso del tiempo acabó haciéndose famoso en todo el mundo.

En 1978 fue elegido Papa el cardenal Karol Wojtyła, arzobispo de Cracovia, que adoptó el nombre de Juan Pablo II. Él fue quien beatificó a Faustina Kowalska el 18 de abril de 1993, primer domingo después de Pascua. El 5 de septiembre de ese mismo año, en Vilna, el Papa rezó ante el cuadro pintado por Eugeniusz Kazimirowski, en compañía del administrador apostólico de la Rusia europea (posteriormente, arzobispo de Moscú), Tadeusz Kondrusiewicz. 

Juan Pablo II canonizó a Faustina Kowalska el 30 de abril de 2000, también el primer domingo después de Pascua, e instituyó la Fiesta de la Misericordia, tal y como Jesús había indicado a Santa Faustina. Dos años después, se publicó el decreto que concede la indulgencia plenaria a los fieles que, cumpliendo una serie de condiciones, participen ese día en los actos en honor de la Divina Misericordia.

El 17 de agosto de 2002, el Papa consagró en Cracovia el Santuario de la Divina Misericordia, una nueva iglesia construida junto al convento en el que vivió y murió Santa Faustina. Allí, Juan Pablo II consagró el mundo a la Divina Misericordia. El Papa murió la noche anterior a la Fiesta de la Misericordia de 2005, y fue beatificado y canonizado, respectivamente, en la Fiesta de la Misericordia de 2011 y 2014.