El 22 de febrero de 1931, en Płock, Jesús se apareció a Faustina y le dijo: “Pinta una imagen según el modelo que ves, y firma: Jesús, en Ti confío. Deseo que esta imagen sea venerada primero en su capilla y luego en el mundo entero. Prometo que el alma que venere esta imagen no perecerá. También prometo, ya aquí en la tierra, la victoria sobre los enemigos y, sobre todo, a la hora de la muerte. Yo Mismo la defenderé como Mi gloria” (47-48).
Poco después, Jesús añadió: “Deseo que haya una Fiesta de la Misericordia. Quiero que esta imagen, que pintarás con el pincel, sea bendecida con solemnidad el primer domingo después de la Pascua de Resurrección; ese domingo debe ser la Fiesta de la Misericordia” (49).
El 1 de mayo de 1933, en Łagiewniki, Faustina realizó los votos perpetuos, y ese día rogó a Jesús “por el triunfo de la Iglesia, sobre todo en Rusia y en España” [3] (240).
Al poco tiempo fue enviada a Vilna, ciudad que entonces pertenecía a Polonia (actualmente es la capital de Lituania). Allí tuvo como director espiritual al sacerdote Michał Sopoćko, quien le mandó que fuera escribiendo un diario con todas sus vivencias espirituales. Por mediación de este sacerdote, el artista Eugeniusz Kazimirowski pintó en 1934 un cuadro de Jesús según la visión que Faustina tuvo en Płock. El cuadro fue expuesto públicamente en Vilna del 26 al 28 de abril de 1935.

3. En la Unión Soviética los cristianos estaban perseguidos (un año y medio antes había sido destruida en Moscú la Catedral de Cristo Salvador) y en media España lo estarían al estallar la Guerra Civil.